Primeros pasos para hacer composta.

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Redactado: 21 de junio de 2010

Por: Mercedes Padilla Vélez

Hay muchas razones para preparar tu propia composta:

1. Conocer lo que entra y por ende lo que sale—¿quien puede atreverse a garantizar todos los ingredientes de una composta comercial, aunque diga que es orgánica? Hay industrias que generan composta, pero hay que verificar cuál es el contenido de metales pesados, aceites, vapores orgánicos y otras sustancias químicas que pudieran resultar peligrosas dependiendo de su concentración.
2. Evitar el cargo de conciencia cuando te sobre comida o se te daña—Del polvo viniste y en polvo te convertirás. Los desechos finalmente se convierten en una tierra color chocolate, rica en nutrientes para las plantas.
3. Reducir la cantidad de basura generada—Todo lo que sea vegetal se puede meter al cubo de composta, reduces el mosquero y los malos olores del zafacón y tienes que ir menos frecuente a botar la basura.
4. Ahorrarte unos chavitos a la hora de la jardinería—Una buena mezcla de composta con tierra, arena y muzgo (peat moss) es lo que necesitas para que tu jardín florezca. Sin necesidad de fertilizantes, ni tantos otros productos que pudieran contaminar las aguas subterráneas y matar a nuestros fabulosos coquies.

¿Cuáles son tus razones?

No es difícil hacer composta, sólo hace falta deseo y voluntad.

1. Primer paso—recolectar los residuos de vegetales, frutas, granos, borra de café, bolsitas de té, cereales, papel toalla, y hasta las hierbas secas y hojarasca del arreglo del patio. Todos estos residuos los puedes guardar en un cubo cerrado.

2. Segundo paso—pasar lo recolectado a un cilindro de tela metálica y ponerlo al sol. Si vives en un apartamento creo que vas a tener que asociarte con alguien que tenga patio o finca.

3. Tercer paso—mover y mover. Mientras más frecuentemente muevas la composta más rápido vas a obtener el producto final. Por ejemplo, si la mueves una vez todos los días es probable que en tres meses ya se haya convertido en tierra fértil. Para facilitar el movimiento es mejor hacer los cilindros de tela metálica anchos en diámetro y bajos en altura. Es bueno tener otro recipiente vacío justo al lado, para poder mover la composta de un lado al otro y facilitar la mezcla.

4. Producto Final—vas a ver que la tierra está bastante homogénea (los materiales de los pasos anteriores ya no se distinguen, fueron reducidos a pequeñitos gránulos de tierra). El color final es uno marrón chocolate.

5. Métodos Alternativos—si no disponen de tiempo para estar moviendo la composta pueden meter los materiales recolectados en una bolsa plástica negra, y mantenerla cerrada. El calor generado en el interior de la bolsa acelerará su descomposición. En mi finca, suelo acumular los materiales en montones en el suelo para que se vayan descomponiendo poco a poco, sin la ayuda de la entremezcla, pero a sabiendas de que puede tardar más de un año en descomponerse.

¿Qué no echar en la composta?

1. No recomiendo echar a la composta ningún tipo de carne. Las carnes se pudren rápidamente y generan pestilencia, atraen sabandijas, y muchas moscas.

2. No echar basura regular como plásticos, latas, etc.

3. Creo que no deben echar ningún tipo de aceite, porque me parece que afectaría a los microorganismos que descomponen los desechos vegetales.